‘300’, proyectada fuera de competición, fue la válvula de escape para una jornada algo desangelada en la Berlinale.
La película dirigida por Zack Snyder, basada en un cómic de Frank Miller sobre tres centenares de guerreros espartanos capitaneados por Leónidas contra las tropas del rey persa Jerjes, dio oportunidad de asistir a una filigrana entre la digitalización y los actores de carne y hueso.
Mucha batalla, mucha sangre, mucha extremidad sesgada por cualquier espada y saltando por los aires, pero también mucha vitalidad, contrastando con una jornada oficial triste.
ROUGHLY TRANSLATED:
300′, projected outside competition, was the valve of escape for a somewhat dreary day in the Berlinale. The film directed by Zack Snyder, cradle in cómic of Frank Miller on three hundreds of Spartan soldiers commanded by Leónidas against the troops of Persian king Jerjes, gave opportunity to attend a filigree between the digitalization and the actors of meat and bone. Much battle, much blood, much extremity slanted by any sword and jumping by airs, but also much vitality, contrasting with a sad official day.